Cada siete minutos muere una persona muere por un paro respiratorio y este nuevo dispositivo podría ayudar a reducir tal incidencia.
Un grupo de estudiantes de Diseño Industrial de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires (UBA) creó Resucit.ar, el primer resucitador automático de diseño nacional que podrá, entre otras cosas, guiar a personas sin preparación en los pasos requeridos para dar la atención primaria al paciente, mientras logran su llegada hasta un centro asistencial.
Resucit.ar realiza compresiones de RCP personalizadas para cada paciente según su perímetro torácico, efectuando entre 80 y 90 compresiones por minuto. Esto es logrado mediante un motor que se encarga de halar la faja que se coloca sobre el pecho del paciente. Mientras ofrece las instrucciones por voz a la persona o profesional de la salud que se encuentre en el lugar durante el arresto cardiaco, el dispositivo emite señales de GPS, lo que permite optimizar la llegada de una ambulancia al lugar del suceso.
Nicolás Vago, Valentín Basilico, Eva Lupi y Lucía Zagasi son los nombres de los autores de este dispositivo que también promete ser de gran ayuda para el personal médico que deba asistir a pacientes en ambulancias en movimiento, o para centros de salud pequeños o retirados. “En la ciudad, poder tener uno de estos dispositivos en zonas de alto tránsito, como por ejemplo, estaciones de subtes y de trenes, tiendas, bibliotecas o universidades, permitiría mantener estable cualquier paciente con compresiones de calidad hasta la llegada de una ambulancia. En ambientes más desfavorables o anegados, las oportunidades son ilimitadas. Por ejemplo, poder bajar de un helicóptero con uno de estos dispositivos como complemento del paramédico sería de gran utilidad”, apuntó Vago en entrevista con Océano Medicina.
Informes del Ministerio de Salud de Argentina han revelado que 70% de los casos de paro cardiorespiratorio ocurren en lugares públicos, donde difícilmente se encuentran personas con la experiencia, preparación y condiciones físicas necesarias para realizar una reanimación tradicional correctamente. Hay un 80%
de probabilidad de que una persona llegue con vida al hospital si se la reanima dentro del primer minuto.
De acuerdo con el Ministerio de Salud, cada siete minutos una persona muere en Argentina por un paro respiratorio, por lo que se espera que la masificación de Resucit.ar pueda ayudar a reducir esta incidencia.
“Al ser un prototipo, todavía se encuentra en fase de prueba y desarrollo. Es indispensable profundizar en el diseño y generar todas las iteraciones necesarias con el fin de llegar a un producto fiable y de calidad. Para lanzar el producto al mercado, dependemos tanto del apoyo económico como profesional que recibamos en este proceso de mejora y ajuste. Creemos que el desarrollo de un producto de esta complejidad debe ser interdisciplinar al 100%”, concluyó Vago.
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