Una peligrosa infección en el área en la zona perianal ha empezado a manifestarse como consecuencia de la utilización de ciertos tratamientos inhibidores contra la diabetes tipo 2. Así lo alertó la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) en un comunicado oficial, donde advirtió que estos casos han ocasionado la hospitalización de 12 personas, de las cuales una falleció.

La infección, llamada fascitis necrosante del perineo (también conocida como gangrena de Founier), ha aparecido como efecto secundario de los inhibidores cotransportadores de sodio-glucosa -2 (SGLT2). Hasta el momento, se desconocía que esos medicamentos podrían acarrear estas consecuencias en los pacientes, por lo que la FDA solicitó “una nueva advertencia sobre este riesgo que se agregará a la información de prescripción de todos los inhibidores de SGLT2 y a la Guía del medicamento para pacientes”.

Los inhibidores de SGLT2 son utilizados para reducir el azúcar en la sangre, al hacer que los riñones la eliminen a través de la orina. Fueron aprobados por la FDA por primera vez en 2013 para ser utilizada en el tratamiento conjunto con una buena alimentación y ejercicio físico, e incluyen variedades como canagliflozina, dapagliflozina, ertugliflozina y empagliflozina; esta última, además, está autorizada para reducir el riesgo de muerte por accidente cerebrovascular  o ataques cardíacos en adultos con diabetes tipo 2. Si no se trata a tiempo “la diabetes tipo 2 puede provocar problemas graves, como ceguera, daño a los nervios y los riñones, y enfermedades cardíacas”.

Sin embargo, según precisa este órgano regulador, desde 2013 y hasta mayo de 2018 la FDA registró la existencia de 12 casos de gangrena de Fournier en pacientes que tomaban un inhibidor de SGLT2. “Este número incluye solo los informes enviados a la FDA y encontrados en la literatura médica, por lo que puede haber casos adicionales que no conocemos”, añaden.

Entre los casos registrados, siete fueron hombres y cinco mujeres, una rareza considerando que esta enfermedad generalmente se manifiesta en pacientes masculinos. Esta vez, los síntomas empezaron a aparecer pocos meses después de que los pacientes de ambos sexos iniciaran el tratamiento con algún tipo de inhibidor de SGLT2, por lo que la administración del fármaco fue detenida en la mayoría de los casos.

En el comunicado se informa que “los 12 pacientes fueron hospitalizados y requirieron cirugía. Algunos requirieron múltiples cirugías, algunos desarrollaron complicaciones y un paciente murió”.

Estas cifras resultan relevantes para la FDA, considerando que otras clases de medicamentos antidiabéticos solo habían generado seis casos de gangrena de Fournier (todos en hombres) durante un período de más de 30 años.

La FDA estima que, en 2017, 1,7 millones de pacientes recibieron una receta para adquirir un inhibidor SGLT2 de las farmacias minoristas de los Estados Unidos.

A la luz de estos nuevos registros, el ente regulador exhortó a las personas que se encuentren en tratamiento con alguno de estos fármacos a “buscar atención médica inmediatamente si experimenta cualquier síntoma de sensibilidad, enrojecimiento o hinchazón de los genitales o el área desde los genitales hasta el recto, y tiene fiebre por encima de 100.4 F o una sensación general de malestar”. Según recuerda la FDA, “estos síntomas pueden empeorar rápidamente, por lo que es importante buscar tratamiento de inmediato”.

Los médicos y profesionales de la salud también deberán evaluar a los pacientes con frecuencia en la búsqueda de alguno de los síntomas descritos anteriormente. En sus recomendaciones, la FDA indica: “Si se sospecha, comience el tratamiento de inmediato con antibióticos de amplio espectro y desbridamiento quirúrgico si es necesario. Interrumpa el inhibidor de SGLT2, controle de cerca los niveles de glucosa en sangre y proporcione una terapia alternativa apropiada para el control glucémico”.

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