Científicos del Cidesi, en México, pretenden monitorear con más precisión los embarazos de alto riesgo
Científicos del Cidesi, en México, pretenden monitorear con más precisión los embarazos de alto riesgo
Océano Medicina
Investigadores mexicanos desarrollaron un dispositivo inalámbrico que funciona con un método que caracteriza la señal cardíaca del feto con mayor precisión que los dispositivos de monitoreo convencionales y que, además, permite enviar la señal a larga distancia desde el hogar de la embarazada hasta el centro de monitoreo o, incluso, al celular del doctor. Se trata de un componente de software y electrónica que realiza un tratamiento analógico y digital del sonido para filtrar la señal y separarla de los ruidos vinculados al líquido amniótico o a los movimientos de la madre.
Esta innovación fue diseñada y alcanzada por científicos del Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (Cidesi), en México, y forma parte de proyecto de vigilancia materno-fetal emprendido por esta institución, con la finalidad de ofrecer una mejor y más constante atención a mujeres con embarazos de alto riesgo, sobre todo si residen en zonas rurales o de difícil acceso.
Respecto a la estrategia para caracterizar la señal cardíaca, el director de Sistemas Microelectrónicos del Cidesi, Sadot Arciniega Montiel, declaró en la web del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología de México (Conacyt): “en una primera etapa se realiza un procesamiento analógico para acondicionar la señal eléctrica adquirida del vientre materno. Posteriormente, se hace un tratamiento digital para separar la señal original del ruido eléctrico y la señal cardíaca materna. Finalmente, la regresamos al plano analógico para reducir las amplitudes de los componentes de ruido y señal cardíaca materna. Esto permite que los especialistas médicos vean de forma más precisa la frecuencia cardíaca del bebé. Otro elemento innovador es la utilización de un electrodo laplaciano y otro convencional, que se colocan también en la parte abdominal de la paciente y que ayudan a caracterizar de forma más precisa la frecuencia de interés”.
Casi al instante, la información recabada sobre la frecuencia cardíaca del bebé, y la actividad uterina de la madre, es transmitida a larga distancia a través del dispositivo. Hasta el momento, el Hospital ha entregado el equipo a 400 pacientes con embarazos de alto riesgo que han sido monitoreadas con este sistema. La instrucción es que deben colocárselo en su hogar para que los datos del seguimiento puedan ser recibidos por la central del monitoreo obstétrico y por el médico tratante, a través de un sistema de datos encriptados y de ubicación satelital que permitirá ofrecer una asistencia inmediata.
“Es una plataforma integral donde, a través de una Central de Monitoreo Obstétrico (CMO), se registra el funcionamiento de los dispositivos médicos conectados en campo. La paciente se lo coloca y al finalizar su estudio, el equipo envía a la CMO los datos de la frecuencia cardíaca de su bebé, la actividad uterina de la paciente y su georreferencia, además de que guarda en su memoria todo un log de información sobre los horarios de los estudios que se realizaron”, detalló Arciniega Motiel al Conacyt.
De acuerdo con sus declaraciones, este dispositivo ya ha contribuido para salvar la vida de 50 bebés en la comunidad de Querétaro, donde ahora planifican entregar otros 110 equipos. Además, en un acuerdo con el Gobierno mexicano, prevén adquirir otros 500 que estarán destinados a poblaciones de bajos recursos. “Es una tecnología de combate de la pobreza en México y de una inclusión social muy importante que e está usando en pacientes de bajos recursos ubicadas en zonas rurales del estado de Querétaro, que no cuentan con la posibilidad para ir a centros de especialidad. Formamos una empresa nacional que se encargará de la comercialización, distribución, servicio y venta de los equipos”, amplió Arciniega Motiel.
El dispositivo cuenta ya con las disposiciones legales para que su uso y fabricación pueda extenderse en México y en Latinoamérica, y sus creadores se encuentran a la espera de la aprobación por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Estadísticas publicadas por la Organización Mundial de la Salud revelan que, a nivel global, en 2015 unas 303.000 mujeres fallecieron por causas relacionadas con el embarazo, 2,7 millones de niños fallecieron durante los primeros 28 días de vida y la cifra de mortinatos alcanzó los 2,6 millones. “La atención sanitaria de calidad durante el embarazo y el parto puede prevenir muchas de esas muertes; sin embargo, a nivel mundial solo el 64% de mujeres reciben atención prenatal cuatro o más veces a lo largo de su embarazo”, alerta el organismo.
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